Goya se ubicada a 200 km de la capital y es la segunda ciudad de la Provincia en importancia.

Con el objetivo de mejorar la capacidad de almacenamiento de la planta potabilizadora, se instalaron dos tanques metálicos de 2.500.000 litros cada uno, provenientes de Estados Unidos, elevándolos debido al tipo de suelo local. Estos tanques, ensamblados en un mes, proporcionaron una capacidad de almacenamiento de 5 millones de litros de agua potable.

El sistema de bombeo se renovó completamente con cuatro electrobombas Grundfos de 55 kW, incorporando tecnología avanzada de control para aumentar la presión. También se implementaron cinco electrobombas sumergibles Flygt de 25 kW con arrancadores Soft-Starter, y se instaló un caudalímetro ultrasónico para medir con precisión el caudal de agua potable.

Se mejoraron las cañerías de captación de agua cruda y se tendió un nuevo alimentador eléctrico con capacidad de conectarse a un grupo electrógeno. Se construyó una nueva subestación transformadora de 315 kVA y se instaló un grupo electrógeno de 750 kVA para asegurar el abastecimiento de energía eléctrica.

En el tratamiento de agua, se reemplazaron los floculadores mecánicos por turbinas de acero inoxidable, y se instalaron válvulas mariposa de 20 pulgadas para mejorar el lavado de filtros. El laboratorio y la sala de guardia se trasladaron a la casa química, mejorando las instalaciones de almacenamiento y dosificación de químicos. Además, se recuperó la antigua casa del jefe de planta para oficinas.

Estas mejoras permitieron que la planta opere de manera más eficiente y segura, garantizando un suministro óptimo de agua potable.