La obra garantizó que la vivienda sea accesible para todas las personas, incluso aquellas con capacidades diferentes, proporcionando igualdad de oportunidades y comodidad a lo largo del tiempo.

Además de contribuir a la inclusión social y promover la equidad en el acceso a viviendas adecuadas para todos los sectores de la sociedad.

Por esa razón se construyeron 23 viviendas de interés social bajo el concepto de «accesibilidad integral».

El objetivo fue crear un «Diseño universal» que proporciona entornos amigables para todas las personas, sin importar su edad o capacidades. La accesibilidad integradora busca minimizar las diferencias y priorizar condiciones de igualdad, autonomía, seguridad y comodidad en el hogar.

Cada vivienda tiene un terreno de 10×20 metros y la superficie total es de 58.11 metros cuadrados.

Las características constructivas incluyen fundaciones de Hormigón Armado, estructura y cerramiento de mampostería de ladrillos cerámicos, revestimientos cerámicos en los sectores sanitarios, y pisos exteriores e interiores de alto tránsito. La cubierta es de chapa acanalada con aislación térmica e hidráulica. La carpintería es metálica para puertas y ventanas, y se utilizan dispositivos de fácil accionamiento.

Las instalaciones sanitarias, desagüe cloacal y electricidad se realizaron de acuerdo a las reglamentaciones vigentes, y el diseño del baño y la cocina responde a pautas de adaptabilidad.